Sunday, Sep 27 2020
Schools in disadvantaged environments cannot perform well
Original posted by Laura Natividad
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Scientific Articles
- Soler, M., Morlà-Folch, T., García-Carrión, R., & Valls, R. (2019). Transforming rural education in Colombia through family participation: The case of school as a learning community. JSSE-Journal of Social Science Education, 18(4), 67-80. https://doi.org/10.4119/jsse-3251
- Khalfaoui, A., García-Carrión, R., & Villardón-Gallego, L. (2020). Bridging the gap: engaging Roma and migrant families in early childhood education through trust-based relationships. European Early Childhood Education Research Journal, 28(5), 701-711. https://doi.org/10.1080/1350293X.2020.1817241
- Morales, J. C. (2016). El informe Coleman, 50 años después. Revista de Sociología de la Educación-RASE, 9(1), 9-21.
- Flecha, R., & Soler, M. (2013). Turning difficulties into possibilities: Engaging Roma families and students in school through dialogic learning. Cambridge Journal of Education, 43(4), 451-465. https://doi.org/10.1080/0305764X.2013.819068
- Gil-Flores, J. (2011). Estatus socioeconómico de las familias y resultados educativos logrados por el alumnado. Cultura y educación, 23(1), 141-154. https://doi.org/10.1174/113564011794728597
- Muijs, D. (2003). La mejora y la eficacia de las escuelas en zonas desfavorecidas: resumen de resultados de investigación. REICE. Revista Iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y Cambio en Educación, 1(2), 0.
- Aubert, A. (2011). Moving beyond social exclusion through dialogue. International Studies in Sociology of Education, 21(1), 63-75. https://doi.org/10.1080/09620214.2011.543854
- Carol, R. V., Gallardo, M. P., & Jiménez, A. A. (2014). El proyecto INCLUD-ED: estrategias para la inclusión y la cohesión social en Europa desde la educación. Investigación en la escuela, (82), 31-43. https://doi.org/10.12795/IE.2014.i82.03
- Caride, E. G. (2016). ¿ Buenos profesores? La voz de los estudiantes de escuelas secundarias en contextos urbanos marginales. Pensamiento Educativo, Revista de Investigación Latinoamericana (PEL), 53(2). https://doi.org/10.7764/PEL.53.2.2016.7
Explanation of the Post
Educational success is not linked to the characteristics of the context but to the educational actions carried out in it. Thus, if the educational actions implemented have proven to be effective, educational improvement will be achieved, regardless of any other aspect of the context in which the school is located. Thanks to this evidence, educational determinism, which is detrimental to results and reproduces inequalities, is overcome.
Other sources
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- Deja de culparme por lo que otros te hicieron, los actos comunicativos de los NAM – Hemen - […] si vienes de una familia sin recursos no puedes estudiar? Por suerte, hoy podemos contar con evidencias científicas que demuestran lo…
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SCIENTIFIC ARTICLE:
Flecha, R., & Soler, M. (2013). Turning difficulties into possibilities: engaging Roma families and students in school through dialogic learning. Cambridge Journal of Education, 43(4), 451–465. DOI: 10.1080/0305764X.2013.819068
COMMENT:
This is a hoax. There is ample evidence demonstrating that all schools can achieve excellent results for all students regardless of their socio-cultural context if they put successful educational actions into practice.
SCIENTIFIC ARTICLES:
Some scientific as well as news articles that demonstrate this:
COMMENT:
Indeed, there are numerous studies that show that all schools can achieve academic success, as well as social cohesion, and that this is not determined by the school’s socioeconomic context, but by the educational actions it implements.
COMMENT:
Este mito de que las escuelas ubicadas en entornos más desfavorecidos no pueden funcionar con éxito, solo se trata de una excusa para aquellas personas que no tienen una perspectiva y una motivación por cambiar la realidad de los diversos centros escolares.
Considero que ante esta situación, es necesario tener en cuenta las distintas necesidades del alumnado que se encuentra en escuelas con determinados entornos sociales desfavorecidos, como pueden ser el fracaso escolar, la inadaptación o la conflictividad. Pero estas problemáticas no se deben contemplar como un impedimento o una amenaza para el proceso de enseñanza-aprendizaje del alumnado.
Pues ante estas realidades, las escuelas y los docentes no pueden permanecer expectantes. En consecuencia, es necesario que todos los que forman parte de la comunidad escolar, y en particular los docentes, afronten decididamente los nuevos retos de la educación actual y desarrollen dinámicas educativas que contribuyan a formar personas capaces de participar activamente en la sociedad, sujetos preparados para afrontar con posibilidades reales de éxito las inevitables dificultades de la vida. (Uriarte, 2006).
La perspectiva general y multifactorial de los problemas no puede servir de excusa para la pasividad de los centros. Todavía hay margen para mejorar desde dentro del sistema escolar. La escuela también tiene alguna responsabilidad en la conflictividad escolar, cuando crea un ambiente que no favorece la comunicación sincera entre profesor alumno, cuando no contempla las peculiaridades de cada uno de ellos y favorece la integración, cuando exige el aprendizaje de contenidos que no están en consonancia con sus necesidades (Miranda, A. et al. 2005).
En mi opinión, desde el ámbito educativo se deben dejar a un lado las quejas sobre el contexto desfavorable del alumnado y con ello, tratar de buscar soluciones para esas condiciones socioeducativas en las que se encuentran los niños/as. Con todo ello, la función de los educadores y el papel de la escuela en sí es encontrar la manera, los recursos y los proyectos educativos que ayuden a erradicar esas desigualdades, teniendo en cuenta las necesidades de estos y partiendo de una visión equitativa. Pues la escuela no debe centrarse únicamente en los problemas del contexto en la que está ubicada, no debe contemplar que la falta de eficacia y eficiencia educativa del alumnado es debido a ello. Pues desde los profesionales de la educación se crear y aplicar proyectos educativos que aporten una mejora en la formación de este alumnado que se encuentra en contextos desfavorables, apostando por el éxito escolar mediante actitudes empáticas, con un pensamiento positivo, y sobre todo con optimismo.
Pues considero que, no debemos conformarnos con la realidad desfavorable que tenemos, la escuela debe ser capaz de dejar a un lado esas problemáticas y convertir las dificultades en oportunidades de igualdad para el alumnado. Debemos fomentar entre todos los agentes educativos, tanto profesionales, educadores y pedagogos/as, como las familias y las personas de la sociedad que nos rodea. Para ello, es importante fomentar el diálogo igualitario entre todos los miembros de la comunidad educativa, basado en la relación entre las personas y en la acción discursiva (Habermas, 1987).
Es gracias a este diálogo por el que se promueve la igualdad de todos los participantes en el proceso de enseñanza-aprendizaje, valorando a posteriori sus participaciones en función de la calidad de sus argumentos y nunca a priori por su posición social o profesional. En conclusión, es evidente que este tipo de mitos se siguen dando en escuelas con entornos desfavorables, y gracias a distintas investigaciones observamos que, si que es posible que estos centros docentes lleguen a ser eficientes y con ello, adopten una buena calidad educativa. Ante esta situación, todos tenemos la obligación de trabajar para que el éxito escolar en estos centros sea posible, sin excusas que valgan.
OTHER SOURCES:
COMMENT:
Desde un primer momento, este mito comienza a considerarse una realidad para ciertas personas cuando se observa que las características de las zonas desfavorecidas siempre llevan consigo la falta de financiación pública, el ambiente empobrecido y el enfrentamiento con los alumnos a la hora de proporcionarles una educación que quizá nunca hayan recibido. De esta manera, Bernal (2009) y Martín (2006), apuntan una dejadez y mal estado de las infraestructuras de los centros rurales, debido a la falta de inversiones en la mejora de este tipo de centros, pero cierto es que esta idea no se da en todos los casos, ya que, gracias a instituciones públicas o bien no gubernamentales, pueden obtenerse ciertos recursos. No obstante, este mito también comienza a aceptarse cuando las personas implicadas en el ámbito educativo no son capaces de dar respuesta a la mejora de las necesidades educativas y se excusan por las razones dadas anteriormente o por otras, que tan solo son el resultado de una mala vocación, así como de no querer cambiar las realidades de los centros educativos en estas zonas, los cuales tienen las mismas oportunidades que cualquier otro.
En suma, es de saber que gran parte del alumnado que compone estas escuelas tiene un bajo rendimiento, una falta de motivación, un bajo nivel de técnicas escolares y una baja concentración y atención, entre otras. De esta forma, es necesario dar una respuesta educativa y una implicación por parte de los agentes educativos para mejorar las condiciones en las que se encuentran, así como mejorar su nivel de vida. Con todo ello, considero que éstos son los encargados de romper con este mito y ser capaces de crear oportunidades y dejar de lado las desigualdades, donde de esta forma, todos/as tengan cabida en el mundo educativo y sean capaces de transformar sus vidas e ir creciendo como personas.
Así pues, se puede observar cómo los esfuerzos tendrán que ser grandes, pero no imposibles para conseguir escuelas de éxito en estas zonas. Para su posible ejecución, considero que una de las características clave es centrarse la enseñanza y el aprendizaje, así como también proporcionar nuevos enfoques en la enseñanza y por qué no, introducir nuevos métodos en esta, pues solo así habrá un beneficio tanto para el alumnado como para los docentes. No obstante, también es necesaria la comunicación y relación entre al alumno/a-profesor/a, ya que las altas expectativas que se transmitan a los estudiantes, podrán lograrse mediante el control de las tareas del alumnado, la retroalimentación positiva y el establecimiento de objetivos realistas que supongan un reto (Maden y Hillman, 1993).
Por otra parte, considero esencial el desarrollo profesional de los agentes educativos. Es de saber que crear una comunidad de aprendizaje implica una gran inversión en el desarrollo profesional de los profesores, pero muchas de las escuelas eficaces y que mejoran cuentan con iniciativas políticas que apoyan un desarrollo profesional de su personal conectado tanto con los intereses individuales como con los institucionales (Henchey, 2001; Reynolds et al., 2001; Barth et al., 1999; Herman, 1999; Joyce et al., 1999).
Por último, pero no menos importante, veo necesaria también la participación de las familias, ya que el apoyo de éstas será importante para el desarrollo de sus hijos/as en la escuela. Está demostrado que uno de los puntos de apoyo que puede resultar más relevante para la mejora de la escuela es la creación de relaciones positivas con los padres y con la comunidad local, así como su implicación en la educación de sus hijos y en la marcha de la escuela (Joyce et al., 1999; Seeley et al., 1990; Maden y Hillman, 1993; Henchey, 2001; Coleman, 1998).
Partiendo de los anteriores puntos que he considerado a destacar, pienso que estas escuelas en zonas más desfavorables deberían de dotarse de todos aquellos beneficios educativos que le hicieran transformarse y avanzar cara una mejora en la educación y en la situación en la que se encuentran las personas que acceden a esta.
En definitiva, lo que llevo a decir es que, considero necesario que las personas inmersas en la educación afronten con valentía y seguridad las diferentes situaciones y retos que se dan en el ámbito educativo, de forma que puedan llegar a ser capaces de transformar la educación mediante metodologías y sistemas en los que hagan de ella una comunidad mejor, en la que la educación sea considerada como una oportunidad para todos/as, y dónde las personas puedan desenvolver todas sus capacidades para que así puedan participar plenamente en la sociedad y ser partícipes de ella.
De esta manera, y solo considerando la educación como una oportunidad y viéndola desde un positivismo por cambiarla, será posible que estos mitos dejen de existir y queden a un lado. Hemos de proporcionar medios y oportunidades todas las personas que formamos parte de la educación para poner fin a esto, y hacer ver que las escuelas en entornos desfavorecidos pueden ser fruto del éxito si se da una oportunidad para ellas y se confía en que es posible llevar a cabo una buena educación a cualquier parte del mundo.
“La educación no es la respuesta a la pregunta. La educación es el medio para encontrar la respuesta a todas las preguntas” – William Allin.
OTHER SOURCES:
COMMENT:
Ésta afirmación resulta ser una falacia, debido a que no está demostrada dicha causalidad; si es cierto que existe correlación en lo afirmado debido a que el hecho de disponer recursos, profesorado y encontrarse en situaciones favorecedoras (es decir, aquello que implica no disponer de trabajos precarios, existir una dificultad económica tanto familiar o del propio centro, o obligar al alumno a no poner en práctica su derecho y responsabilidad de educarse), pueden ser elementos que favorezcan el funcionamiento de la escuela y promuevan una educación de calidad para dicho entorno. Sin embargo, como bien se muestra en un vídeo subido por la “Fundación Trilema” en la plataforma de YouTube, denominado “PROFES. La buena educación”, donde se nos muestra la situación, contexto y perspectiva de la escuela y la educación desde tres lugares del mundo distintos; se resalta una realidad que carga directamente contra la afirmación que se ha expuesto, ya que, uno de los contextos que se nos muestra, es la situación educativa que existe en Guinea Ecuatorial, donde en comparación y contraste con otros contextos, no disponen de tantos recursos ni son tan avanzados para poderlos considerarlos un impacto de interés dentro de la educación (en comparación al avance tecnológico existente); sin embargo, se muestra una defensa y diferenciación de su situación, ya que como se afirma en el propio vídeo, sí es cierto que el disponer de un entorno y situación favorable, así como poder disponer de recursos; son elementos que promueven y ayudan a desarrollar una educación de calidad, pero no por ello debemos de caer en ésta falacia, pues el aprendizaje no sólo depende de éstos elementos para aprender y obtener una verdadera educación de calidad; ya que existen muchos contextos donde pese a disponer de dichas facilidades, no promueven, disponen, ni desarrollan un buen aprendizaje ni enseñanza, y por lo tanto, su educación y escuela no es de calidad ni funciona bien bajo éste sentido.
Por otra parte, dicha afirmación también puede inducir a dos tipos de errores que obviamente van a causar una discriminación y desigualdad educativa, así como social.
El primer error que encuentro es aquello que se puede conocer como “Efecto Mateo”, en el sentido de la existencia del hecho de que aquellas escuelas que obtienen mejores calificaciones dentro de ránkings de resultados (medidos bajo determinados criterios) serán premiadas con mayores facilidades educativas; es obvio, que se establece una correlación entre la adquisición de facilidades educativas, una situación y entorno favorable, y la obtención de unas calificaciones óptimas dentro de los ránkings de resultados. Sin embargo, es aquí donde surge dicho efecto previamente mencionado, ya que si sólo se premia a aquellos centros que cumplen determinados criterios y requisitos, nunca se mejorará la situación de otros centros donde su situación sea más decadente o dificultosa, perpetuando así su situación e incluso, llegando a agravarla, ya que no podrán seguir los pasos de las demás escuelas en cierto sentido competitivo; estableciéndose así una diferenciación, discriminación y desigualdad tanto educativa como social.
A su vez, el segundo error viene relacionado al primero, y es que, el hecho de apartar y discriminar a aquellas escuelas que se encuentran en una situación desfavorable, va a generar a su vez un rechazo tanto de profesionales efectivos que quieran asistir, ya que existirá ciertos prejuicios y frustración profesional por dichos agentes, así como un rechazo a aquellas personas asistentes y provenientes de dicha escuela de situaciones desfavorables, por el hecho de menospreciar su nivel educativo y académico, además de nuevamente por los prejuicios promovidos por un discurso de recursos e imagen estética del centro en cuestión.
En conclusión, que una escuela se encuentre en un entorno desfavorecido, no implica que su nivel de funcionamiento, nivel de enseñanza y aprendizaje, así como nivel académico del alumnado, como profesional de los docentes; vaya a no ser óptimo y de calidad. Pues al final aquella fruta que de peor apariencia (externa) tiene, puede contener el sabor (interno) más sabroso que haya existido en comparación a otras.
OTHER SOURCES:
– PROFES. La buena educación. (2016, 25 noviembre). [Vídeo]. YouTube. Recuperado de: https://www.youtube.com/watch?v=4Ty273fiD5s
– Martínez, J. C., & Choi, A. (2012). La evaluación como instrumento de política educativa. Dialnet. Recuperado de: //dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=4014638
COMMENT:
Las escuelas situadas en entornos desfavorecidos siempre han estado señaladas por el fracaso escolar. Esto no implica que no puedan funcionar bien, con esto me refiero a que una escuela situada en un entorno desfavorecido seguramente deba de trabajar más en algunos aspectos, buscando la motivación por parte del alumnado presente y el involucramiento de las familias en esta.
Primero hay que eliminar los prejuicios sobre estas escuelas y tener claro que la educación es para todos y todas, no para unos pocos.
En la mayoría de las zonas desfavorecidas conviven culturas consideradas casi siempre inferiores, señaladas como “delincuentes” donde los prejuicios que han tenido siempre hacen que les sea difícil crecer en sociedad si siempre llevas la etiqueta puesta.
Por otro lado, mayoritariamente el nivel económico de estas zonas es bajo y como consecuencia ¿dónde van menos? A la escuela. La escuela conlleva unos gastos que no todas las familias son capaces de afrontar y si encima, el niño o la niña que tiene que acudir hasta los 16 años, puede tener ganancias económicas a esta edad para mejorar la vida del hogar, no seguirá su formación. Saldrá al mercado laboral, porque al final es lo que en ese momento necesita y le “beneficia”.
Por lo tanto, la escuela ha de conseguir llamar la atención del alumnado, conseguir una motivación constante y sobre todo ganar la inclusión de las familias en la escuela, dándole la importancia a la educación que merece y sobre todo que sigan apoyando a sus hijos e hijas en su formación.
Las escuelas situadas en zonas desfavorecidas sí funcionan bien si las cosas se hacen bien. Tras las lecturas vistas, saco la conclusión de para que sean eficaces y positivas hay que hacer cambios. No hay que seguir la receta de la escuela ideal sino buscar adaptarse al entorno y buscar los intereses de allí donde se sitúe y de aquellos que la forman.
Para mí, todas las escuelas son necesarias y aunque cueste mucho cambiar la visión más vale avanzar con pasos pequeños que no avanzar nunca y más vale aprender poco que no aprender nada.
OTHER SOURCES:
COMMENT:
En la actualidad nos encontramos con que muchos niños y niñas están sufriendo las injusticias de la desigualdad social y la segregación económica. Es por este motivo que la desigualdad académica y de recursos de los que disponen es en algunas ocasiones y en algunas circunstancias abismal.
Muchas familias luchan porque esto deje de existir ya que la educación debe ser igual para todos los niños y niñas sin importar la clase social.
A pesar de la lucha constante sobre este tema, si que es cierto que es inevitable que haya centros educativos más equiparados y preparados. Sobre todo este gran problema lo sufren aquellos centros educativos que se encuentran en entornos más desfavorecidos y más olvidados.
Todo esto no influye en el funcionamiento de las escuelas ni en el rendimiento de los niños, pero sí que es cierto que influye la visión de la sociedad hacia este tipo de escuelas y la visión que se tiene de estas.
Trabajar en los entornos y sectores más desfavorecidos no es una tarea fácil, que en muchas ocasiones se percibe como algo impensable que no se puede llegar a cambiar y a mejorar, pero lo cierto es que los buenos profesionales, docentes, pedagogos y gente que se dedique al ámbito educativo, sabe que este entorno es un desafío de superación, no es tarea fácil pero tampoco imposible y si que es cierto que un buen trabajo en este tipo de sitios puede cambiar muchas familias y puede llegar a calar más en la gente de lo que podemos imaginar. esto es porque ya por el entorno o por la situación de primeras se dan por perdidas ciertas situaciones pero simplemente hay que hacer y desempeñar bien nuestra tarea y ver más allá de todos esos problemas, entenderlos y saber adaptar las políticas educativas que se nos han implantado en un primer momento para que estas sirvan y se adapten a todos los entornos que nos podemos encontrar.
Los docentes deben saber ante las diferentes circunstancias y escenarios a los que se pueden llegar a enfrentar, y es por ello que deben saber adaptarse tanto ellos como los conocimientos que imparten y no al contrario.
El alumna y la alumna son los protagonistas de la educación y por ello su participación y sus opiniones deben ser consideradas y tomadas en cuenta. Escucharlos y escucharlas nos dice mucho del alumnado al que nos enfrentamos, y además que se les de su sitio, su importancia y su lugar correspondiente favorece al entorno educativo ya que se sienten partícipes de su propia educación, por lo que con todo esto llegamos a la conclusión de que las escuelas sea el entorno en el que sea que se encuentren deben saberse adaptar y moldear para que esta diferencia educativa ya existente en la sociedad, sea lo menos posible y no vaya a más.
OTHER SOURCES:
A sovint sentim comentaris de escoles que son ‘’pitjors’’ que altres tan sols per tenir més alumnes immigrants, i és un tipus de racisme cada día més normalitzat en el nostre dia a dia i en la nostra societat. Diversos estudis demostren què el fracàs escolar no depèn de la procedència dels alumnes, sinò del context social,familiar, i de les actuacions docents i escolars. Des del ministeri d’educació ja informen sobre com s’han de dur a terme certes actuacions en totes les escoles de certes regions. Pot ser no és fracàs escolar de part dels infants, i realment és fracàs per part de la organització del currículum? Com a exemple i demostració de que aquestes afirmacions son falses, tenim l’escola Joaquim Ruyra, ubicada a un barri conflictiu de l’Hospitalet de Llobregat, on un 92% dels estudiants són extrangers. Aquesta escola obté uns resultats prou més alts que moltes escoles d’èlit de la zona mitjançant tècniques com l’aprenentatge dialógic mitjançant les explicacions entre iguals. Asseguen que, si a una aula hi ha silènci, algo no va be. Per aquesta raò, podem afirmar què els resultats educatius depenen de la persona i del seu context vital.
Fonts: https://www.elmundo.es/papel/historias/2017/03/19/58ca8b8ee5fdea672d8b46ad.html
EVIDENCIA CIENTÍFICA:
Valls Carol, M.R. et al, (2014). El proyecto INCLUD-ED : estrategias para la inclusión y la cohesión social en Europa desde la educación. Investigación en la escuela. n. 82 ; p. 31-43. El proyecto INCLUD-ED : estrategias para la inclusión y la cohesión social en Europa desde la educación (mecd.gob.es).El proyecto de investigación INCLUD-ED (Estrategias para la inclusión y la cohesión social en Europa desde la educación, 2006-2011) fue un Proyecto Integrado de la prioridad 7 del VI Programa Marco de la Comisión Europea. El fin último de este proyecto fue identificar qué acciones concretas contribuyen a favorecer el éxito en la educación y la inclusión social a lo largo de las distintas etapas de la enseñanza obligatoria. Se presentan tanto el proyecto como el contexto en que ha sido realizado, sus objetivos, los subprogramas en los que ha sido estructurado y la metodología seguida.
COMENTARIO:
Concluyendo con las evidencias científicas de Includ-ed, deja demostrado que las escuelas en entornos desfavorecidos pueden tener muy buenos resultados llevando a cabo el proyecto indicado y de la forma indicada.
Mucha gente cree que las escuelas en entornos desfavorables son sinónimo de fracaso. Estoy convencida que es totalmente falso. Todas las escuelas pueden llegar a alcanzar grandes logros sin tener en cuenta el entorno. No debemos pensar que el entorno es el principal problema del funcionamiento de una escuela. Por mucho que una escuela se encuentre en una zona desfavorable, no quiere decir que encontramos alumnos con pocas capacidades y habilidades. Todos tenemos el derecho a aprender y por muy dificultoso que sea el aprendizaje de algunos alumnos, no debemos involucrar al entorno para justificarlo. Es cierto que se ha evolucionado bastante en el ámbito educativo pero, sin embargo, considero que falta un largo recorrido para eliminar estos prejuicios. De cara al futuro debemos apostar por una educación inclusiva y sin comentarios negativos dirigidos a ciertas escuelas.
A nivel personal, me he encontrado con ciertas experiencias que me han hecho pensar mucho en esta situación. Muchas veces he oído comentarios despectivos hacia una institución sólo por su apariencia y el lugar donde estaba ubicada.
a
COMMENT:
The hypothesis that schools in disadvantaged environments cannot perform well is based on the notion that students from thes areas (with a certain socioeconomic status) are likely to get inferior results than those that are achieved by students from families with a high socioeconomic level (Gil-Flores, 2011). About this, it is worth highlighting the role and fundamental incidence of schools as an essential element to reverse the cycle of inequality. In this way, schools can guarantee high levels of learning, compensating the effects of the socioeconomic context through successful educational actions such as dialogic learning. (Flecha, & Soler, 2013).
In this manner, the effectiveness of schools in disadvantaged areas has been reviewed and demonstrated, as well as the keys to the success of these processes (Muijis, 2003). This affirmation continues to be patented by the implementation of actions such as the Dialogic Inclusion Contract (DIC). So, with its application hand in hand with successful actions in different areas, as happened in a case study of a primary school located in a disadvantaged area, it led not only to the improvement of academic performance and the increase in school attendance, but also affected relationships between students and between the school and the community (Aubert, 2011).
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La premisa de que las escuelas en contextos desfavorecidos no pueden funcionar bien, parte de la concepción de que los alumnos procedentes de estas zonas (con cierto estatus socioeconómico), son proclives a obtener resultados inferiores a los que logran los alumnos procedentes de familias con un nivel socioeconómico alto (Gil-Flores, 2011). Sobre esto, cabe destacar el papel y la incidencia fundamental de las escuelas como elemento esencial para revertir el ciclo de desigualdad. De esta manera, las escuelas que pueden garantizar altos niveles de aprendizaje, compensando los efectos del contexto socioeconómico a través de acciones educativas de éxito como el aprendizaje dialógico (Flecha, & Soler, 2013).
De este modo, se ha revisado y demostrado la eficacia de las escuelas en zonas desfavorecidas, así como también las claves en el éxito de estos procesos (Muijis, 2003). Esta afirmación se sigue patentando por la implementación de actuaciones como el Contrato de Inclusión Dialógica (DIC). Así, con su aplicación de la mano de acciones exitosas en diferentes ámbitos, como sucedió en un estudio de caso de una escuela primaria situada en un área desfavorecida, dio lugar no solo a la mejora del rendimiento académico y a un aumento de la asistencia escolar, sino que también incidió sobre las relaciones entre los estudiantes y entre la escuela y la comunidad. (Aubert, 2011).
SCIENTIFIC ARTICLES:
Flecha, R., & Soler, M. (2013). Turning difficulties into possibilities: Engaging Roma families and students in school through dialogic learning. Cambridge Journal of Education, 43(4), 451-465. DOI: 10.1080/0305764X.2013.819068
Gil-Flores, J. (2011). The socioeconomic status of families and students’ educational achievement. Cultura Y Educacion, 23(1), 141-154. DOI: 10.1174/113564011794728597
Muijs, D. (2016). La mejora y la eficacia de las escuelas en zonas desfavorecidas: resumen de resultados de investigación. REICE. Revista Iberoamericana Sobre Calidad, Eficacia Y Cambio En Educación, 1(2). Recuperado a partir de
https://revistas.uam.es/reice/article/view/5349
Aubert, A. (2011). Moving Beyond Social Exclusion through Dialogue. International Studies in Sociology of Education, 21(1), 63–75. DOI: 10.1080/09620214.2011.543854
Tras leer y documentarme sobre si las escuelas en entornos desfavorecidos pueden funcionar bien, he llegado a la conclusión de que muchas veces se le hecha la culpa al estudiante, cuando realmente es la escuela y la educación que ofrece, la que no se adapta, no permite o impide que los resultados académicos de esa persona sean buenos, y no su entorno, coincidiendo con lo que señala Duque, E., Valls, M.R., Fisas, M. (2004), “las principales causas del fracaso escolar están en la educación y no en el individuo”
A su vez, hay muchos proyectos en la actualidad que demuestran que el nivel socioeconómico o el origen étnico no son determinantes académicos, y que por tanto, esto no afecta al rendimiento escolar, tal y como dice El Informe Coleman, (2016) “El error grave (…) es confundir lo que es una correlación entre variables, como el entorno socioeconómico y las aspiraciones familiares, con una relación causal”, es decir, en muchas ocasiones es simplemente casualidad que pase esto y que cuando una escuela tiene los suficientes materiales para trabajar bien, da igual de donde provenga y elentorno del estudiantado.
Algunos de estos proyectos a los que me refería anteriormente son por ejemplo, el Proyecto INCLU-ED, donde a través de acciones educativas exitosa (SEA), “las escuelas han mejorado el desempeño de los estudiantes y mejorado la cohesión social, brindando a todos los niños mejores oportunidades de aprendizaje para reducir los problemas sociales y educativos.” Teniendo en cuenta el entorno de cada familia y con la finalidad de llegar a esa escuela integradora e inclusiva que se pretende conseguir con estos proyectos.
– Carabaña, J. (2016). El Informe Coleman, 50 años después. Revista de la Asociación de Sociología de la Educación 9(1): 9-21.
– Duque, E., Valls, M.R., Fisas, M. (2004). Del fracaso escolar al éxito para todos y todas. Una visión desde la pedagogía crítica. En E. Duque, M.R. Valls y M. Fisas (Eds.), Dialogar y transformar: Pedagogía crítica del siglo XXI (pp. 51-67). Editorial GRAÓ.
– Flecha, R., Soler, M. (2013). Convertir las dificultades en posibilidades: involucrar a familias y estudiantes gitanos en la escuela a través del aprendizaje dialógico, Cambridge Journal of Education, 43(4), 451-465, DOI: 10.1080/0305764X.2013.819068.
En muchas personas persiste la idea de que en los colegios con entornos desfavorecidos, normalmente este hecho lo relacionan con un bajo nivel económico o escuelas con un porcentaje elevado de inmigración, los resultados no son elevados. En ocasiones esta idea errónea también está relacionada con las escuelas públicas o privadas. Cuantas veces no hemos escuchado la frase típica de ” los colegios privados tienen un nivel de aprendizaje mucho más elevado o ” lo inscribo en un colegio privado porque no quiero que se rodee con personas que no tiene perspectiva de futuro”
Considero que el tipo de entorno en el que convive cada alumno no tiene que ser reflejado en la escuela. Desde mi punto de vista, todas las personas independientemente de sus condicones son capaces de adquir concimentos para obtener resultados elevados. El echo de aprender y obtener los resultados esperados depende de la manera en la que se aprende y la motivación para hacerlo. Por lo tanto, parte de esta tarea corresponde a los profesores, a demás de explicar conocimientos técnicos que son necesarios es muy importante trasmitir motivación y hacer ver que todo el mundo es capaz de lograr lo que se propone.
Además, el porfesorado tiene que tener en cuenta el tipo de alumnos a los que se enfrenta i adaptarse a las necesidades de cada uno para conseguir el éxito a través de la motivación e implicación por las dos partes.
Un ejemplo claro que rompe con esta afirmación y la convierte en un bulo es la noticia que se publicó en el diario elPeríodico donde se afirmaba que los alumnos del colegio de l’Hospitalet, un colegio donde el 90% de los alumnos son extranjeros y el 95% reciben becas de comedor han obtenido resultado de elite, es decir con una media muy elevada superando la media catalana.
https://www.elperiodico.com/es/sociedad/20161122/colegio-joaquim-ruyra-milagro-escolar-hospitalet-informe-pisa-5640141
“Las escuelas en entornos desfavorables no pueden funcionar bien”, esta es una evidencia errónea, ya que se ha demostrado que escuelas que están en zonas desfavorables pueden obtener resultados buenos, como es el caso de la escuela “Mare de Deu de Montserrat” una escuela de Cataluña que con un 97% de alumnos con familia inmigrante consiguen el premio a la mejor escuela de Cataluña, otro caso es el de la escuela “Joaquim Ruyra” es una escuela pública de Cataluña con un 95% de alumnos con beca en el comedor y han obtenido resultados que igualan a escuelas privadas de élite.
Las escuelas en áreas desfavorecidas se enfrentan a desafíos adicionales debido a la falta de recursos financieros y otras muchas dificultades. Sin embargo, esto no implica que no puedan proporcionar una educación de alta calidad.
El éxito de una escuela se construye principalmente a través del esfuerzo que los estudiantes y profesores ponen en su trabajo diario. Con un entorno educativo adecuado, docentes comprometidos y una comunidad escolar que valore la educación, estas escuelas han demostrado ser capaces de proporcionar una educación sólida. Es necesario reconocer que hay numerosos casos de éxito en escuelas ubicadas en estas zonas, donde los alumnos/as han superado desafíos significativos para lograr grandes resultados académicos. En lugar de hacer generalizaciones negativas, debemos concentrarnos en apoyar y fortalecer estas instituciones. Esto implica proporcionar recursos adicionales y oportunidades para que todos los niños/as, sin importar su entorno, tengan acceso a una educación de calidad.